jueves, 30 de julio de 2009

Leer con odio

Toma un libro, ábrelo en cualquier parte, no lo leas: Devóralo, destrúyelo, humíllalo, hazlo tuyo, redúcelo a su mínima expresión pero hazlo tuyo. Disfruta esa "ele" esa consonante maldita perdida entre tantas, huélela, pruébala, siente su textura y después, si todavía puedes: destrúyela.

Haz honor a su memoria y continua, lee más y destruye el mundo que creaste, piensa en él como si no hubiera más y teme. Teme ese momento en que se acaban las hojas porque peor que la hoja en blanco es el final de un libro.

Odia a los colofones, escúpelos, piensa oraciones imperativas, lee, escucha, mira, siente sobre todo siente.

_____________ Y después, cuando hayas destruido ese libro, gózalo, porque es tuyo, porque tu lo escribiste de nuevo, porque haz hecho algo que antes nadie jamás ha logrado, porque ese mundo que creaste nunca ha sido ni volverá a ser.

----------------------------------Lee pero lee con pasión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario